martes, 8 de septiembre de 2015

Martes Criticón: Scream 2

El género de terror es, muy probablemente, el género cinematográfico que más síndrome de la repetición sufre. Puede que ya estemos curados de espanto por las múltiples secuelas que las películas de superhéroes generan, pero, al final del día, son las películas de miedo las que más reboots, remakes y secuelas tienen. Curiosamente, y muy en contra de la moda que asola al Hollywood de hoy en día, hay un dicho popular que afirma que las segundas partes nunca fueron buenas, por lo que cabe cuestionar la verdadera razón por la que las secuelas siguen siendo rentables para los estudios. 

Con este paradójico arma de doble filo, el recientemente fallecido Wes Craven nos ofreció la secuela del mitiquísimo filme Scream: esa historia en la que un anónimo asesino, armado con una de las caretas más terroríficas de la gran pantalla y amante tanto del género de terror como de las llamadas telefónicas, origina - a golpe de cuchillo - tsunamis de sangre en apacibles poblaciones de Estados Unidos.

¿Éxito o fracaso?



● Año: 1997
● Director: Wes Craven
● Cast: David Arquette, Neve Campbell, Courteney Cox, Sarah Michelle Gellar, Jamie Kennedy, Laurie Metcalf, Jerry O’Connell, Jada Pinkett, Liev Schreiber.
● Música: Marco Beltrami
● Duración: 120min.


En Scream 2, Sidney Prescott, después de los terribles sucesos en Woodsboro, intenta empezar una nueva vida acudiendo a la universidad, donde conocerá a un grupo de buenos amigos con los que, eventualmente, tendrá que enfrentarse al sangriento cuchillo de Ghostface. Resulta que nuestra joven protagonista, por exigencias del guión (y, supuestamente, por eso de que ha sido el epicentro de un caso ampliamente comentado en los medios de comunicación de la nación), se ha convertido en un imán para los psicópatas asesinos que, en esta ocasión, se dejan ver por primera vez el día del preestreno de Stab: esa película dentro de la película que está basada en el libro que Gale Weathers (también presente en la carnicería universitaria) publicó sobre los eventos de Woodsboro.


De esta forma, y haciendo justicia a la increíble intervención de Barrymore en la primera entrega de la saga, la apertura de Scream 2 es digna de aplauso. Williamson decidió que sería una buena idea introducir en la trama la adaptación del libro de Gale a modo de película de terror (la ya mencionada Stab), no sólo para hacer un guiño a la constante fiebre Hollywoodiense por adaptar obras literarias a la gran pantalla, sino también para poder introducir una especie de remake dentro de una secuela que, por si no fuera poco, es presentado al espectador el mismo día de su estreno en una sala de cine con decenas de jóvenes disfrazados del propio asesinoQue alguien me diga que eso no es brillante. 

Y es que todo en Scream 2, siguiendo las normas de las secuelas de las películas de terror que Randy enumera en un momento determinado del filme, tiene que ser mejor: los asesinatos tienen que ser más espectaculares, tiene que haber más cadáveres, y la puesta escena tiene que mejorar. Y, qué queréis que os diga, Scream 2 no sólo cumple esos requisitos con creces, sino que también establece una agradecidísima constante en la saga: el principio y el final de Scream siempre serán imprevisibles.


Sin embargo, y a pesar de que esta entrega de la saga tiene momentos absolutamente perfectos, Scream 2 pierde algo que parecía ser marca fundamental de la casa Craven-Williamson: la crítica al cine en general. Está claro que esta secuela tiene un gran componente de burla hacia el género de terror, pero la explosividad que tenían algunos de los diálogos de Scream pasa bastante desapercibida por el simple hecho de que los guionistas dieron prioridad al terror en vez de a la ironía.

Pero no pasa nada. Scream 2 sigue funcionando como una gran cinta de terror que gustará a los amantes de la primera y que, claramente, perfila el camino sobre el que se va a establecer Scream 3.

Porque sí: si hace una secuela, se termina con una trilogía.

●Te gustará si: te "conformas" con una secuela en la que las sorpresas están aseguradas, la crueldad de los asesinatos se multiplica por siete y si, como a mí, te encanta ver al equipo de Sidney, Dewey, Randy y Gale juntos otra vez.

● No te gustará si: lo que más te gustaba de Scream eran sus explosivos diálogos y sus referencias cinematográficas.



Jerry

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