lunes, 8 de septiembre de 2014

Juego de Tronos: Tercera Temporada

El problema de las series (o películas) cuyas historias son adaptaciones de novelas es que uno no sabe hasta qué punto la calidad de la obra audiovisual depende más o menos de su escritor original. Sin embargo, es bien sabido que no hay obra audiovisual que sea totalmente fiel a la obra literaria en la que está basada (es un hecho irrefutable independientemente de lo que el Maldito Club del Libro pretenda defender), por lo tanto, si hay diferencias significativas entre una y otra obra, ¿de verdad podemos inclinar la balanza de la “responsabilidad de calidad” hacia la novela o hacia la serie?

Se puede. Pero es muy difícil. Y sobre todo es difícil con obras tan complejas como las novelas de la saga Canción de Hielo y Fuego (erróneamente conocida como Juego de Tronos por la serie que inspiró hace ya tres años).

Creador: David Benioff, D.B. Weiss
Género: Drama, Aventuras.
Reparto: Peter Dinklage, Nikolaj Coster-Waldau, Lena Headey, Emilia Clarke, Kit Harington, Liam Cunnigham, Stephen Dillane, Carice van Houten, Isaac Hempstead-Wright, Sophie Turner, Maisie Williams, Alfie Allen, Jack Gleeson, Sibel Kekilli, Richard Madden, Michelle Fairley…
Duración: 3 temporadas (2011 – Presente)
País de Origen: EEUU


Que haya utilizado el término “complejidad” para Juego de Tronos puede haber sorprendido a más de uno. Su historia, tal y como se nos presenta en la serie, puede resumirse como una simple lucha medieval por el trono de una tierra desconocida en la que, conforme se van conociendo sus secretos más místicos, van apareciendo criaturas exóticas o poderes mágicos que podrían hacerla parte del ya vulgar género fantástico. Sin embargo, con Juego de Tronos uno debe recordar la concreta y especial división temática de los libros y la soberbia cantidad de personajes que pueblan las interminables hojas de las novelas. Sólo haciendo esto uno podrá valorar el esfuerzo y perfeccionismo que los guionistas de la serie hacen por, no sólo ganarse a un público que desconoce las obras en las que está basada, sino también por complacer a los inquisitivos seguidores de los libros de George R. R. Martin perfilando los personajes hasta el más mínimo detalle y cuadrando las múltiples tramas en temporadas televisivas que, para lo que son los libros, resultan cortas.

Sí, George R.R. Martin es un genio, pero los realizadores de la gallina de los huevos de oro de la HBO también. No sólo están llevando a la pequeña pantalla una versión audiovisual de la historia notoriamente fiel a la saga literaria, sino que además han construido una serie que, con cada temporada que pasa, evoluciona una barbaridad y aviva el fuego de la adicción en miles y miles de seguidores. Juego de Tronos está en boca de todo el mundo. Y no es de extrañar.


 En esta tercera temporada, en la que se nos muestra la continuación de la guerra desatada en la anterior temporada, volvemos a ser testigos de las épicas andanzas de una Daenerys que en los libros no me resulta para nada impresionante pero cuya figura se ve notoriamente ensalzada en la serie, las desdichadas vidas de la que siempre será mi familia favorita a pesar de que, desde el principio (y Sean Bean mediante), se nos dejase bien claro que los lobos en Poniente tenían pocas oportunidades de alcanzar el trono, la tozudez de un presunto rey cegado por una bruja roja, el juego de espías del bastardo al otro lado del muro y las estrategias de aquellos que siempre pagan sus deudas.


Juego de Tronos una vez más reafirma lo fantástica que es por su fidelidad a los libros y se supera a sí misma al ofrecer a su querido público una temporada repleta de aventuras, traición, asesinatos, guerras y retorcidos casamientos: un espectacular preludio para el posterior Festín de Cuervos que asolará las llanuras de los Siete Reinos.

En definitiva, estamos ante la que probablemente sea la producción más grandiosa y ambiciosa del panorama televisivo actual y, por ello, es imprescindible darle una oportunidad. Si eso no os parece razón suficiente para hacerlo, no dejéis de verla aunque sólo sea por el hecho de poder participar en las apasionantes conversaciones que acaparan un tiempo considerable de las vidas de jóvenes y adultos que, simplemente, no pueden dejar de hablar de ella.

Porque sí, todo el mundo habla de Juego de Tronos. Y lo sabéis.

Lo que MÁS me gusta: lo eficaz que es la adaptación a la pequeña pantalla de los fascinantes libros de George R.R. Martin.

Lo que MENOS me gusta: que, inevitablemente, la serie ha empezado a pisarle los talones a la saga literaria.

Jerry

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...